La ministra de Trabajo, Raquel «Kelly» Olmos, dijo este jueves que los bloqueos a empresas por parte de Camioneros como mecanismo de protesta para reclamar mejoras salariales son una instancia «que resulta violenta y que, en consecuencia, no puede ser un método ordinario».
En diálogo con radio El Destape, la titular de la cartera laboral explicó: «Los trabajadores y los empresarios tienen que negociar. Las paritarias son una institución que el peronismo reivindica, queremos que se fortalezcan. Ahora, cuando esa situación entra en una tensión que excede la paz social o el interés del conjunto, tenemos instrumentos, como la conciliación obligatoria».
Las declaraciones de Olmos se enmarcan en la creciente tensión entre las empresas del sector y Camioneros, que exigen un 131% de aumento y amenazan con medidas de fuerza si no se cumplen sus demandas. Se dan, además, en medio del alineamiento de su principal dirigente, Pablo Moyano, con La Cámpora. El secretario de la CGT estuvo el lunes pasado en el acto por el Día de la Lealtad que la agrupación kirchnerista realizó en Plaza de Mayo.
Si bien Olmos reconoció que una paritaria en torno al 60% se queda corta en relación a la evolución de la inflación, señaló que, en este contexto, «no podemos generar un nivel de ajuste que sea excesivo en términos del impacto que va a tener sobre el costo de vida».
«(El ajuste) puede ser justo para los trabajadores de ese sector (Camioneros). Todo lo que un trabajador puede acceder, lo merece. El tema es que dada esta heterogeneidad, cuando hay sectores que avanzan excesivamente, y eso impacta sobre la dinámica inflacionaria, tienen que entender que eso es muy insolidario con los que quedan atrás», planteó.
Y reforzó: «Hay que encuadrar todo dentro de una posibilidad en la cual los trabajadores puedan tener un vida digna, pero en un marco donde el bienestar general esté presente. Nadie se puede realizar en una comunidad que no se realiza, todos tenemos que ser responsables de cuál es la construcción que estamos haciendo».
La funcionaria que reemplazó a Claudio Moroni reconoció que «es un equilibrio difícil» el que se alcanza en este contexto de alta inflación y enfatizó que es «prioritario» quebrar la tendencia. Asimismo, dijo que el Gobierno no descarta otorgar un aumento de suma fija.