La vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner criticó al Poder Judicial en la previa de la sentencia en el juicio de la causa Obra Pública, en la que se la acusa por supuestos delitos de corrupción.
«Se violaron todas las garantías constitucionales, todo lo que se dijo es una absoluta mentira, y el juez que instruyó esta causa, con las mismas obras y denuncias, había dicho que no era competente», expresó, en referencia a Julián Ercolini, ahora involucrado en los escandalosos chats entre altos funcionarios judiciales vinculados al macrismo y el Grupo Clarín.
Mañana martes 6, el Tribunal Federal Oral N° 2 dará a conocer el veredicto de la causa Obra Pública, en la que se la acusa a la exmandataria de ser la jefa de una asociación ilícita con malversación de fondos del Estado.
La compañera de fórmula del actual presidente Alberto Fernández reiteró que la Justicia construyó “la imagen de un ladrón” y aseguró que, al terminar su mandato, contaba con “los mismos bienes por los que ya había sido investigada tres veces”. “Cuando dejé la presidencia volví a la misma casa donde vivía antes”, subrayó.
Durante todo el juicio, que duró tres años, «todas las pruebas dicen que es una absoluta falsedad el querer involucrarme como presidenta de la República, porque se está diciendo que hubo dos presidentes jefes de una asociación ilícita durante tres gobiernos democráticos, es imposible», planteó Fernández de Kirchner en declaraciones al medio Folha de San Pablo.
En la misma línea, agregó: «En el Sur se investigó, hubo sobreseimiento, entonces cuando se violan todas las garantías, y el juez dice una cosa, cuando había dicho otra -a partir de las denuncias del Gobierno de Macri-, obviamente habrá una condena».
Por otra parte, desmintió su vinculación laboral con el empresario, Lázaro Báez, dueño de Austral Construcciones e imputado en el juicio de Vialidad, aunque admitió que era amigo del expresidente, Néstor Kirchner. «No fue socio, uno es socio cuando uno tiene un contrato de sociedad. Era amigo de Néstor, no amigo mío, como otros amigos empresarios», afirmó.
En otro pasaje de la entrevista, habló del encarcelamiento de Luiz Inacio Lula da Silva, en Brasil, que lo atribuyó a un accionar del Poder Judicial contra líderes populares. «Los mismos que lo metieron preso, lo fueron a buscar y entonces revieron lo que habían hecho, porque cuando impidieron que sea candidato, llegó Bolsonaro, las consecuencias le hicieron mucho daño a Brasil y a muchos sectores».
Por último, en la tónica de sus últimos discursos, cargó contra el expresidente Mauricio Macri y denunció vínculos con los jueces de la Corte Suprema. «El lawfare en la Argentina no solamente persigue a los dirigentes populares sino que protegen lo que pasó durante el macrismo», sostuvo la exmandataria.
«Se comprobó que hubo espionaje sobre los familiares de las víctimas del ARA San Juan, y los jueces que él había puesto a dedo lo sobreseyeron alegando que fue en defensa de la seguridad del Presidente, cosa que no se puede. Esa misma Cámara es la que lo protege. Por ejemplo, ingresaron 45 mil millones de dólares del FMI que nadie sabe dónde están», cuestionó.
Este martes, los jueces Jorge Gorini, Rodrigo Giménez Uriburu y Andrés Basso darán a conocer la sentencia del juicio conocido como Vialidad. En el caso de que exista una condena, no quedará firme hasta la confirmación de la Corte Suprema, última instancia, posterior a la Cámara de Casación. (NA)