Horacio Pietragalla expondrá este lunes un informe en el que asegura que jueces y fiscales llevan “procesos penales fraudulentos” para lograr » la proscripción de figuras centrales” del oficialismo como Cristina Kirchner.
El Gobierno de Alberto Fernández presentará este lunes en la Organización de las Naciones Unidas (ONU) un informe sobre Derechos Humanos donde apuntará contra la Justicia, la oposición política y los medios de comunicación.
El evento tiene lugar en Ginebra donde hoy habrá una sesión especial del Consejo de Derechos Humanos en la que Argentina presentará su Examen Periódico Universal (EPU), que justamente releva la situación de los derechos humanos en el país.
En este marco, la Secretaría de Derechos Humanos en conjunto con la Cancillería redactaron un informe de 30 fojas, que difundió días atrás y que será expuesto hoy por Horacio Pietragalla.
Titulado Cuestiones emergentes: principales desafíos, en las fojas 18 y 19 del informe oficial, Pietragalla presenta una descripción de la democracia con un sesgo netamente kirchnerista. Habla de “discursos del odio” que ocurren en Argentina y que “culminaron con el intento de magnicidio de la actual Vicepresidenta de la Nación, y dos veces Presidenta, Cristina Fernández de Kirchner”.
“Estos postulados se advierten de modo creciente en diversos espacios políticos, en medios masivos de comunicación y en redes sociales. Se trata de una problemática compleja que constituye una preocupación a nivel internacional”, describe el funcionario.
En este marco, Pietragalla incluyó el concepto al que tanto hace referencia CFK, Lawfare, para apuntar contra el Poder Judicial, el sistema de partidos y las empresas.
“Desde el actual Gobierno Nacional y el movimiento de derechos humanos se advierte que la práctica del lawfare – impulsada por sectores del Poder Judicial, la oposición política y sectores concentrados del poder económico y mediático – constituye una práctica violatoria de los derechos humanos y opera como condicionante de los procesos electorales, de la agenda política y de la opinión pública”, continúa el secretario señalando en el informe.
Y agrega: “En estas causas judiciales, como las que enfrenta la ex Presidenta de la Nación, bajo la excusa de la investigación y sanción de hechos de corrupción, se violan garantías fundamentales del Estado de Derecho: se desconocen garantías básicas del debido proceso como la presunción de inocencia, el derecho de defensa y el principio de objetividad que debe guiar la actuación del Ministerio Público Fiscal. Estas causas penales se impulsan únicamente en contra de referentes políticos que representan a sectores populares, mientras se mantiene en la impunidad a sectores poderosos, que han permitido o avalado el endeudamiento criminal que ha generado pobreza e indigencia en la población”.
Siguiendo el relato de la Vicepresidenta, Pietragalla incluyó el planto de proscripción política sobre el cual el kirchnerismo busca hacer pie en este año electoral. “Lamentablemente, aunque el Gobierno Nacional cambió en diciembre de 2019, y terminó así la práctica de avasallamiento a la independencia judicial por parte del Poder Ejecutivo Nacional, la persecución política en sede judicial se encuentra plenamente vigente, en tanto integrantes del Poder Judicial y del Ministerio Público Fiscal siguen llevando adelante procesos penales fraudulentos contra las principales figuras políticas del actual oficialismo, otrora oposición al gobierno de la anterior gestión. Las estrategias de persecución, cuya finalidad última es la proscripción de figuras centrales del escenario político, son ejecutadas en la práctica por jueces y fiscales que visitaban asiduamente al ex presidente, tanto en su residencia oficial como en sus residencias privadas, lo que demuestra la espuria convivencia entre ambos sectores y la continuidad de una política de hostigamiento que afecta los principios democráticos de nuestro país, en especial aquellos que hacen a la independencia e imparcialidad con la que deben actuar el Poder Judicial de la Nación y los Ministerios Públicos”, reza la foja 19 del informe que será presentado este lunes en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU.