Las cifras oficiales de extracción de hidrocarburos dan cuenta de la dimensión de la cuenca neuquina.
Entre 2010 y 2018 Argentina atravesó una fuerte crisis en el sector hidrocarburífero, que se evidenció en fuertes caídas en los niveles de producción de crudo y gas. La tendencia comenzó a revertirse gracias al aporte de Vaca Muerta y hoy, la formación geológica está llevando a Neuquén a romper todos los récords del sector.
Según las estadísticas publicadas por la Secretaría de Energía de la Nación, en 2022 Neuquén extrajo 15.706.157 m3 de crudo, una cifra nunca antes alcanzada por esa provincia ni por ninguna otra. Además, puntualmente en diciembre la provincia neuquina produjo 308.660 barriles diarios de petróleo, una cifra también histórica, de acuerdo a lo informado por el Ministerio de Energía y Recursos Naturales provincial.
El “boom” de producción que se produjo en Vaca Muerta llevó incluso a que Neuquén prácticamente triplicara sus niveles de producción de crudo en solo cinco años. Es que en 2017, cuando llegó a su punto más bajo, extrajo 5.687.679 m3 de petróleo. Con el valor alcanzado en 2022, se registró un incremento del 176,14%.
También las cifras de extracción de gas crecieron el 2022. De acuerdo a los números difundidos por el Gobierno nacional, el año pasado se extrajeron 30.660,7 millones de m3 de gas en la provincia neuquina, una cifra récord para la provincia y para el país. En relación al 2021, el crecimiento fue del 16,4%.
Ninguna otra provincia se acerca hoy a esos niveles de producción y todo parece indicar que la diferencia se seguirá agrandando. Es que las estadísticas dejan claro que, mientras Neuquén rompe récords de producción, el resto de las provincias petroleras sigue recorriendo un camino lleno de obstáculos, con más números negativos que positivos. Algunas incluso tuvieron en 2022 récord negativo de producción.
Potencial de crecimiento
Aunque las cifras de producción alcanzadas por Neuquén rompieron todos los récords vigentes, hay indicios suficientes para pensar en la posibilidad de que las cifras sigan creciendo en los próximos años.
Un factor fundamental es que las compañías petroleras que están explotando Vaca Muerta anunciaron inversiones por USD 7.500 millones sobre la formación geológica. Se trata de una cifra que supera lo invertido por las empresas del sector en todo el país en años anteriores.
Además, durante 2022 se realizaron inversiones que rozaron los USD 5.000 millones. Muchas de ellas comenzarán a reflejarse en la producción recién este año. Muchas otras podrían llegar más adelante, considerando que hasta el momento solo se ha explotado el 8% de la superficie de Vaca Muerta.
Por otro lado, se debe considerar que ya inició la obra del gasoducto Néstor Kirchner, que en principio estaría listo en el próximo invierno. Una vez terminado, permitirá incrementar la capacidad de transporte en 24 millones de metros cúbicos de gas diarios.
A esto se suma el nuevo gasoducto anunciado ayer por el ministro de Economía, Sergio Massa. El funcionario informó que llegó a un acuerdo con el Banco de Desarrollo de América Latina (antiguamente conocido como Corporación Andina de Fomento – CAF) para la construcción de un gasoducto por USD 540 millones.
La inversión cubrirá el tramo entre La Carlota-Tío Pujio. Un poco más al norte se completarán las conexiones de Reversal del Norte y las plantas compresoras. Se trata de una obra clave para transportar el gas de Vaca Muerta al centro y norte del país.
Además, es una pieza muy importante también para los planes a futuro, que contemplan la exportación de gas hacia los países vecinos, principalmente a Brasil. De hecho, el objetivo del Gobierno nacional es revertir el déficit en la balanza energética de USD 5.000 millones registrado en 2022 y pasar a tener un superávit de USD 12.000 millones en 2025. Esto implicaría por supuesto un sostenimiento de los niveles creciente de producción de gas en Vaca Muerta.