Anoche un hombre de 31 años llegó hasta la estación de Servicio Shell situada en Láinez y Provincias Unidas, se acercó a los surtidores y se roció con gasoil, para luego amenazar con «volar todo».
Una mujer que estaba trabajando como playera en la estación conocida como «Orbe», fue quien intercedió para que el hombre no avance. Además, en una de sus manos tenía una bomba molotov.
Finalmente los empleados llamaron a la policía y cuando arribaron los efectivos, lo derivaron al Hospital Penna ya que se supo que padece de trastornos psiquiátricos. Quedó internado en el mencionado centro médico con custodia policial.