En diálogo con A la tarde Sandra contó parte de la interna familiar que tiene en contra de su hermana Verónica.
Cuando en el 2014 Jorge Jacobson murió, les dejó a sus tres hijas Paula, Verónica y Sandra varios inmuebles, entre ellos una casa en un barrio privado de Pilar. Nada hacía pensar en ese momento que la propiedad en cuestión iba a ser motivo de disputa y una guerra sin fin entre sus hijas.
Según el periodista Pablo Montagna, “En vida Jacobson les donó la propiedad a sus tres hijas. Al principio la habitaron, luego la pusieron en alquiler y en 2020 decidieron ponerla en venta”. El periodista, al aire de Nosotros a la mañana (El Trece) también destacó que las herederas se repartieron legalmente propiedades en la Argentina y en el exterior.
Al parecer, hasta el 2020 el vínculo entre ellas se mantenía fluido y sin grandes complicaciones, pero fue la venta de esta casa la que hizo estallar una guerra que pareciera no tener fin entre las hijas del reconocido periodista.
Verónica habría decido irse a vivir a ese inmueble, aunque sin la conformidad de sus hermanas, y se desató un conflicto familiar. Carlos Broitman, el abogado de Sandra, contó detalles en el programa conducido por el Pollo Álvarez: “Hubo un contrato de locación que se venció y Verónica dijo que buscaba la llave de la casa y se quedó ahí viviendo”.
Además, el letrado explicó que las dos herederas no pueden entrar a la propiedad y que realizaron la denuncia por la supuesta usurpación. Incluso señaló que Verónica había expresado su deseo de comprar la casa, pero hasta el momento no llevó a cabo la transacción. “Si no se llega a un acuerdo, se propone llevar a remate la casa. Además, cobrar un canon locativo real por los años y beneficios que tomó y que perjudicó a las otras dueñas de la propiedad”, agregó.
Ahora, la que rompió el silencio fue Sandra. En diálogo con A la tarde (América), la periodista contó su versión de los hechos y se mostró muy dolida con su hermana Paula. “Ahora Verónica me ofreció plata para comprarme mi parte de la casa. Yo me enteré, no por ella, que había vendido su casa en Pilar. Después de muchas vueltas, ella mostraba la casa, toda en mal estado. Yo dije: ‘la quiere ella’”.
Y acto seguido, continuó: “Después me enteré que había vendido su casa. Mi abogado habló con el de ella y dijo que había compradores pero con la oferta más baja… Y la realidad es que ella escrituró en febrero. Dice que está levantando deudas, las cuales se generaron porque ella estuvo ocupando la casa sin pagar Arba e impuestos municipales”.
Al respecto, también aclaró que su hermana se quedó a vivir en la propiedad y que nunca le pidió permiso para hacerlo. “Ella no me lo pidió. Me informó que se quedaba antes de bloquearme. Me dijo: ‘Yo te informé porque soy tan dueña como vos’”, relató indignada.
Sandra contó que no le extraña la manera de actuar de su hermana, ya que cambió mucho desde que su papá no está. “Desde que murió mi papá es coherente con su proceder”, dijo. En cuanto a la tercera hermana, Paula, se refirió de una manera tajante. “Es un panqueque. Arrancó con mis abogados y ahora está con el abogado de ella. Le debe haber dado algo de plata, pero prefiero dejarla aparte”.
Más adelante, la periodista se explayó: “Paula está esperando a que le pague. Supongo. A ella no le pagó tampoco. Además ella no tiene casa, perdió varias cosas. Pero está con el mismo abogado, Gustavo Cadenas y la verdad es que nunca vi una cosa así. Pienso que se autopercibe como juez”.