La ex pareja del humorista volvió a declarar ante la Justicia de Mendoza y el artista sería citado en las próximas semanas.
La ex esposa de Juan “Cacho” Garay, Veronica Macías, amplió su declaración testimonial ante la Justicia de Mendoza. Durante la jornada del miércoles, ratificó las acusaciones por violencia de género contra el humorista y su cómplice, Sandra Astudillo, quien se encuentra imputada en la causa y cumple una prisión domiciliaria.
La citación a la que se presentó la cantante lírica se trató de un segundo llamado de las autoridades, debido a que la declaración debía haberse tomado en junio. En esa oportunidad, la víctima sufrió una descompensación luego de que se suspendiera la audiencia sobre la investigación de los delitos de abuso sexual, amenazas y tenencia ilegal de armas de fuego de uso civil que le imputaron al comediante.
De esta manera, la denuncia volvió a relatar los hechos denunciados desde el inicio de la causa ante la fiscal a cargo del caso, Mónica Fernández Poblet, y los abogados Daniel Romero, representante de Cacho Garay, y Carlos Moyano, quien asistió como defensor de Sandra Astudillo. La indagatoria duró varias horas, pero no trascendieron detalles de las declaraciones por tratarse de un delito de instancia privada.
Mientras que la investigación continuará su curso, se espera que en las próximas semanas el humorista sea citado para que amplíe su indagatoria. Asimismo, es probable que la ex reina de la vendimia sea sometida a la misma instancia, debido a que Macías indicó que la mujer habría sido parte de actos sexuales colectivos a los que habría sido obligada a participar bajo presuntas amenazas efectuadas por el comediante.
De acuerdo a la información de Télam, Garay fue acusado de haber cometido los delitos de “amenazas agravadas por el uso de arma, abuso sexual con acceso carnal en un número indeterminado de hechos, privación ilegítima de la libertad agravada por ser cometida contra su cónyuge y tenencia de armas de fuego de uso civil”, lo que derivó en su aprehensión en abril.
En cambio, Astudillo fue imputada por el delito de “abuso sexual con acceso carnal en número indeterminado de hechos cometidos en contexto de violencia de género en calidad de coautora”. Además, cumple con una prisión domiciliaria desde que fue detenida en el Aeropuerto Internacional “El Plumerillo” de Mendoza, cuando regresaba de sus vacaciones en Cancún, México, el pasado 13 de junio.
A pesar de que el humorista fue beneficiado con la prisión domiciliaria en mayo, éste volvió a ser trasladado a la cárcel de San Felipe, tras haber incumplido con la orden de restricción que existía entre él y Macías. La detención fue ordenada por la funcionaria pública después de que se comprobara que el hombre hostigaba a su ex pareja por medio de llamados telefónicos.
De acuerdo con la investigación que se inició por la denuncia por amenazas que presentó la víctima en junio, las pericias revelaron que las llamadas intimidatorias que recibió la mujer fueron realizadas por el denunciado. En este sentido, los resultados apuntaron que el origen de las comunicaciones era el teléfono de línea contratado en el domicilio de la hermana de Garay, en donde cumplía la prisión preventiva al tener que abandonar la vivienda que compartía la pareja.
Según los datos que trascendieron de esta denuncia, Macías señaló que todas las llamadas que había recibido contaban con varios factores en común, ya que nadie le respondía y solamente se escuchaba el sonido ambiente. Desde que la segunda detención se efectuó en julio, la defensa del comediante solicitó que vuelva a ser beneficiado con el arresto domiciliario.
Pese a que la resolución judicial debía ser anunciada el pasado 12 de septiembre, el titular del Juzgado Penal Colegiado Nro. 1 de Mendoza, Federico Martínez, aplazó la definición para el próximo 4 de octubre. Ese mismo día, se realizará una audiencia de apelación, en la que participarán ambas partes para debatir el pedido.
