Rafael Nadal se despidió del Masters 1000 ATP Madrid Open, tras ser eliminado en octavos de final por el checo Jiri Lehecka, que lo tuvo a maltraer con su servicio (llegó a sacar a 229 kilómetros por hora) y se impuso en dos sets con parciales de 7-5 y 6-4.
La lógica indica que disputó su último partido ATP oficial en territorio español.
«La vida y el cuerpo me han ido mandando señales de que éste día iba a llegar, pude despedirme jugando que no es poco, así que muchísimas gracias por todo», dijo Nadal, también acompañado por toda su familia y equipo de trabajo en este último tiempo, ante quienes aclaró -también con una sonrisa cómplice- que todavía no se retira.
Lo intentó todo Nadal. Hizo un buen primer set, pero lo perdió. Persiguió la remontada por todos los medios. Una actitud y disposición que honran su condición de rey de la tierra batida, pentacampeón del torneo.
Lehecka, de 22 años y nº 31 mundial, mostró un saque letal, una derecha y un revés que vuelan.
Lehecka se las verá con el ruso Daniil Medvedev.