Maximiliano De Mira, abogado de Ángel Gallardo, detenido por el frustrado robo de cables de media tensión que terminó con 4 fallecidos -entre ellos su hijo- y un herido, aseguró que su asistido no fue quien condujo la camioneta Volkswagen Amarok hasta el hospital, para abandonar los cuerpos.
Ese dato, ahora refutado por el penalista -quien no aportó mayores detalles hasta tanto declare su defendido-, es uno de los que más rechazo social habían generado en el marco de este delito, descubierto entre la noche del lunes y la madrugada del martes.
Esa versión concuerda con la que pudieron reconstruir los investigadores y que figura en la causa que tramita el fiscal Gustavo Zorzano, titular de la UFIJ Nº 18, aunque no le quitaría responsabilidad en el traslado a Ángel Gallardo.
Existe una octava persona, además de los 5 electrocutados, Gallardo padre y un policía cuyo handy apareció en la camioneta, que habría tomado intervención en un tramo del suceso.
Se trata de Bruno Martín Uribe, de 34 años, quien sería familiar de Facundo (32), fallecido en el hecho junto con Joaquín Acosta (18), Fernando Gallardo (25) y Federico Strick (28).
«Lo que pudimos reconstruir es que Gallardo padre trajo a los heridos desde el campo, pero en un momento dado dejó el mando de la Amarok a Bruno Uribe, quien finalmente condujo la camioneta hasta el hospital. Gallardo, en tanto, habría seguido camino hacia su casa en el auto que hasta ahí manejaba Uribe», explicó un investigador.
De Mira confirmó hoy que la Policía llegó a la detención de Gallardo, en su domicilio de La Pinta 377, «a partir de una persona que aparentemente estaba en el nosocomio (sería Bruno Uribe). Tendrá que determinar la instrucción de la causa qué hacía allí esta persona y cómo sabía eso».
Sobre Bruno Uribe, según se supo, no pesa por el momento ninguna imputación.
«No surge del expediente que mi asistido (Ángel Gallardo) dejó a las personas en el hospital. Su detención no se produjo en el nosocomio ni en el campo, sino en su domicilio particular», remarcó De Mira.
El abogado también dijo que su defendido tiene intenciones de declarar, pero que mantuvo silencio ayer ante el fiscal por su consejo, teniendo en cuenta que hay medidas de prueba pendientes, como el análisis de los celulares secuestrados.
«La idea es que de acá a unos días declare. Ya pedimos su excarcelación», agregó.
También informó que Gallardo padre «carece de antecedentes penales», que se dedica a la compra y venta de chatarra y material ferroso y que la camioneta Amarok está a su nombre.
La imputación contra el hombre de 63 años es de robo agravado por ser en despoblado y en banda en grado de tentativa. Ese delito (consumado) prevé una pena de prisión de entre 5 y 15 años, pero al ser una tentativa la sanción se reduce de un tercio a la mitad.
En el día de hoy, si las condiciones de salud se lo permiten, el fiscal Zorzano indagará al único sobreviviente de la electrocución en el campo de la ruta 33: Emanuel Chamorro Sepúlveda (20), quien es novio de una hija de Gallardo y permanece internado en el hospital Municipal.