Sin la euforia de otras oportunidades, pero con el mismo valor de lo que significa un título, Villa Mitre festejó esta noche el triunfo ante Bahiense del Norte, por 83 a 69, que le permitió sellar la serie 3-1 y quedarse con las redes del Osvaldo Casanova.
Más allá de saber bien de qué se trata esto de ganar campeonatos, siempre es reconfortante conseguirlo.
Y como se vio al equipo, terminar golpeando las palmas frente a su público y cantando el «dale, dale veee, dale, dale veee», no fue más que descargar todo lo contenido en un año largo, que se dividió en dos competencias con un mismo plantel, con todo lo que eso significó.
Villa Mitre no quería más. Era el día y lo demostró desde el arranque del partido, con un iluminado Federico Harina que desgastó a Franco Ginóbili, quien intentó defenderlo en gran parte del primer cuarto.
El tirador anotó 12 puntos de los 21 de su equipo en 8 minutos y tuvo como aliado a Franco Pennacchiotti.
El zurdo primero se mostró efectivo con su tiro a 45 con tablero y cuando contuvieron más a Harina, cayó en el pick and roll, se posteó o aprovechó los cambios defensivos.
Bahiense abrió la cancha, intentó generar espacios para el 1×1, a partir de la amenaza de Lamonega atacando el cesto y descargando, o bien aprovechando alguna ventaja para atacar de frente con Santiago o Hollender.
Lo cierto es que repartiéndose el juego entre los tres y con un buen cierre de cuarto se fue al primer descanso 25-22 abajo.
Al regreso, extendió el parcial a 9-1 para ponerse a 1, ya con Santiago asumiendo mayor protagonismo y demostrando plena confianza.
No obstante, Renzi saltó de la banca con dos triples consecutivos, se reactivó la Villa adelante y se potenció atrás, con una defensa más extendida y tratando, ahora con Blanco y antes con Depaoli, de desgastar a Lamonega, a quien también siguió Ruibal.
Y poco después se sumó Lozano en esa rotación defensiva para sacar de juego al motor de Bahiense.
Enfrente, después de no poder Ginóbili con Harina, se encargó un ratito Tobías Rodríguez y luego tomó la posta Augusto Cárdenas. Es decir, de ambos lados estaban bien detectados los que, a partir de su juego, más podían dañar.
Y ahí, en las variantes, mostró más efectividad Villa Mitre, porque al dominante Pennacchiotti por momentos lo acompañó Alem y poco a poco la Villa se fue consolidando, sin tantos altibajos.
El primer tiempo lo cerró 46 a 36, con parcial de 21-12, después de estar 25-24 arriba, en 1m15 de iniciado el cuarto.
También en 1m15, pero del complemento, un doble de Pennacchiotti, un triple de Alem y un doble de Harina le dieron, hasta ahí, la máxima a la Villa, que así extendió el parcial (28-12) 53-36 y obligó a Navallo a pedir tiempo.
El juego entró en una meseta, con Bahiense intentando atacar en la pintura y chocando con los grandes, y cuando sacó faltas falló seguido en la línea 3-7.
La Villa, en tanto, bajó sus porcentajes, aunque igual le alcanzaba para mantenerse, marcando diferencia en la rotación.
El partido, a esta altura, con un trámite de ida y vuelta, poco efectivo y con 15 de luz de la Villa, se había desvirtuado.
El Colorado fue metiendo a los pibes, de hecho, cerró el cuarto con dos juveniles y un cadete en cancha.
Por lo visto en 30 minutos, de no suceder nada raro y con 14 de ventaja, la Villa parecía tenerlo controlado.
De todos modos, el parcial de 6-0 que metió Bahiense, bajó la diferencia a un dígito (66-54) y obligó a Seba Acosta a pedir tiempo.
A partir de ahí, Pennacchiotti fue el faro ofensivo de Villa Mitre, absorbiendo juego y distribuyendo para el resto.
Ya 15 arriba y con 3m50 por jugar, el público villero se entusiasmaba, cantaba y levantaba el clima de una final un tanto apagada.
Ya se cerraba el torneo de Primera, era el premio «consuelo» en un año diferente, donde quedó la bronca por no llegar a la final por el ascenso en la Liga Argentina y los cañones, con el mismo plantel, apuntaron al torneo local.
Y una vez más lo hizo Villa Mitre, consiguiendo el noveno título, algo diferente por el contexto, aunque no con menor valor.
Un campeonato siempre es motivo de festejo
SINTESIS
Villa Mitre (83): F. Depaoli, F. Harina (25), M. Iglesias (5), F. Pennacchiotti (23), I. Alem (15), fi; G. Romero (3), N. Renzi (6), A,. Blanco (1), N. Lozano (5) y V. Ruibal. DT: Sebastián Acosta.
Bahiense del Norte (69): A. Lamonega (21), F. Ginóbili, P. Santiago (17), J. García (12) J.P. Hollender (8), fi; A. Cárdenas (7), E. Roberson (2), M. Fernández y F. Mariano (2), T. Rodríguez y L. Ruggiero. DT: Alejandro Navallo.
Cuartos: Bahiense, 22-25; 36-46 y 50-64.
Árbitros: Alejandro Ramallo, Emanuel Sánchez y Marjorie Stuardo.
Cancha: Osvaldo Casanova (Estudiantes).
Serie: Villa Mitre, 3-1.
