Los vecinos relatan en su denuncia que fueron víctimas de un gran engaño, porque si bien firmaron unos papeles que daban apariencia de legalidad lo cierto que cuando fueron a solicitar los permisos para construir sus propias viviendas a la municipalidad se les informó que esos terrenos no tenían ningún plano aprobado ni tampoco cumplidas las obras de luz y agua obligatorias para permitir la venta de los mismos; situación que persiste en la actualidad.
La denuncia cuenta con frondosa documentación que acreditaría la maniobra ilegal por la que el oportunista vendedor cobró la totalidad del precio de cada uno de los lotes por sumas muy importantes.
La Unidad Fiscal Instrucción de 2 ha quedado a cargo para avanzar en esta investigación que vuelve a poner la lupa sobre una conocida modalidad delictiva que aprovechan vendedores inescrupulosos para utilizar las necesidades de la gente y poner en el mercado inmobiliario parcelas que no están en condiciones legales de venta.