El Papa Francisco se cayó este viernes, se golpeó con la mesa de luz y se lastimó la cara. A pesar del accidente que sufrió, este sábado continuó desarrollando su agenda de actividades. Allí fue captado con moretones en el rostro. Así lo anticipó el periodista Nelson Castro.
En las imágenes posteriores al accidente, se puede ver a Francisco mientras saluda a una persona y tiene un hematoma a la altura del mentón. Este sábado, el Vaticano conformó que el papa Francisco sufrió “una contusión” que le provocó el hematoma en el rostro con el que apareció en los diferentes actos y ceremonias que tenía previstos.
La lesión en el lado derecho de la cara es “consecuencia de una contusión” sufrida el vienes por la mañana, cuando “se golpeó la barbilla con la mesilla de noche”, indicó el director de la oficina de prensa de la Santa Sede, Matteo Bruni, cuyo mensaje fue difundido por la agencia EFE.
No obstante, el sumo pontífice pudo continuar con sus actividades. Este sábado, presidió el décimo Consistorio en la basílica de San Pedro, donde se formaron 21 cardenales de todo el mundo, según consignó Vatican News. Entre los nuevos cardenales, se encontraba el arzobispo de Santiago del Estero y primado de la Argentina, Vicente Bokalic.
El papa anunció el consistorio público ordinario para la creación de nuevos cardenales a principios de octubre. Los nuevos cardenales de América Latina son Carlos Gustavo Castillo Mattasoglio, Arzobispo de Lima (Perú); Vicente Bokalic Iglic, Arzobispo de Santiago del Estero (Argentina); Luis Gerardo Cabrera Herrera, Arzobispo de Guayaquil (Ecuador); Fernando Natalio Chomali Garib, Arzobispo de Santiago (Chile) y Jaime Spengler, Arzobispo de Porto Alegre (Brasil). Con la creación de estos 21 prelados, el Colegio Cardenalicio se compone ahora de 253 cardenales, de los cuales 140 son electores y 113 no electores.
En la homilía a la que asistieron 5.500 creyentes, el papa invitó a los creyentes a cultivar la humildad y la fraternidad y advirtió: “La carcoma de la competencia destruye la unidad”.
Durante su discurso, también exhortó: “Necesitamos mirar hacia nuestro interior y presentarnos ante Dios con humildad”, y llamó a los nuevos cardenales a esforzarse por caminar en el camino de Jesús.