Pablo Cesari, presidente del Centro Industrial de Panaderos, habló con Primero Bahía sobre la devaluación y el aumento de productos.
«La verdad es que está bastante complicado, arrancamos el lunes sin precios, entre martes y miércoles se fue aclarando un poco, la harina subió un 30% y los demás entre 15 y 20%», comenzó diciendo Cesari.
Además dijo que «la reacción no es la mejor pero no queda otra que seguir hacia adelante, es complicado trasladar todos los aumentos al mostrador, la persona que venía el lunes a comprar por 700 pesos un kilo de pan llevará un cuarto hoy en día. Depende el lugar de la panadería es el costo del pan, en algunos lugares superó los 1000 pesos».
«Las facturas estarán entre los 2 mil y 2500 pesos, depende los productos que se utilicen se da la calidad también. Uno se tiene que adecuar al bolsillo de la gente, nosotros somos una industria y es más complejo. El tipo de consumo cambió desde la pandemia, empezó a consumir solo lo que necesitaba, fue un momento difícil para este sector porque mantuvimos las puertas abiertas y la gente trabajando, la gente lleva lo que va a consumir en el día», afirmó.
Para cerrar dijo que «Nosotros en precio subimos 100%, estamos a un 25% abajo del costo que tendríamos que tener, para estar al alcance de la gente el panadero es quien absorbe esa diferencia. Yo creo que hoy estamos cubriendo gastos, tratando de perder el valor del producto, no se tiene la rentabilidad que se debería tener. Por suerte en lo que es materia prima no hay problema, sí el lunes se arrancó sin precio, te decían aumenta todo pero no tienen precio, nosotros teníamos stock para hacer los productos, nosotros tardamos tres o cuatro días en acomodar los precios y esos días perdimos nosotros».