Según informó Pepe Ochoa en LAM, la modelo habría terminado su vínculo con Gabriel Lechuga Liñares a raíz de una situación de celos.
A casi dos meses de confirmar su relación con su nuevo novio, Sabrina Rojas se habría separado de Gabriel Lechuga Liñares. A pesar de las tiernas muestras de cariño, de sus salidas públicas y del futuro que planificaban, la modelo habría decidido poner fin al vínculo. La noticia fue confirmada por Pepe Ochoa en LAM (América).
Según explicó el panelista, el conflicto habría empezado porque Flor Parisé —expareja de Lechuga y madre de su hijo— aún mantiene una fuerte presencia en la vida del hombre, lo que provocó la furia de Rojas. “Se fueron de vacaciones, hicieron un intermedio entre Punta Cana, Cartagena, en el medio Flor Parise estaba infumable. Ella estaba peor por la ex”, comenzó diciendo el panelista introduciendo al vínculo entre el empresario y su expareja, la actual novia de Karina Jelinek.
Acto seguido, Yanina Latorre agregó: “La crisis empezó porque Flor Parisé, Lechuga y su hijo se llevan muy bien. Ella (Parisé) es muy metida en la relación, es tóxica”. La relación entre Liñares y su ex sería tan buena que, en una suerte de ritual anual, la familia realiza un viaje juntos. “Se fueron de vacaciones una semana Lechuga, Flor y el hijo, porque una vez al año se van los tres para que el chico esté con los dos. No pasa nada entre ellos, y eso Sabrinita no lo entendió”, explicó la panelista.
Ahí, en ese punto delicado donde la paternidad se cruza con la nueva vida amorosa, pareció fracturarse la breve historia entre Sabrina y Lechuga. Quizás en una mezcla de celos, falta de confianza o tal vez una incompatibilidad de tiempos y afectos. Mientras tanto, la actriz decidió no pronunciarse en sus redes sociales ni hacer comentarios al respecto. A pesar de esta situación, la modelo y el empresario aún continúan siguiéndose en redes sociales, lo que deja la puerta abierta a una posible reconciliación.
En ese sentido, Pepe Ochoa sumó otro matiz: la ambigüedad. Porque cuando se le preguntó directamente a Rojas si seguía en pareja, la actriz optó por el silencio evasivo: “Ante la pregunta, estuvo muy esquiva. ‘La verdad que no tengo título’”, citó el panelista.
La publicación no pasó inadvertida. Lejos de ser una simple imagen romántica más, se convirtió en una declaración pública de afecto, dejando atrás su conflictiva separación de Luciano Castro. Con esta foto, la conductora dejó entrever que la relación con Gabriel Liñares avanzaba firme, más allá de si el vínculo se terminaba de definir como un noviazgo o no.
Como extra, a principios de mes, al cumplir 45 años, Rojas compartió una profunda reflexión. “¡Hola, 45! Llegaste y no me agarrás desprevenida”, comienza el texto que publicó en su cuenta de Instagram, acompañado por una sensual foto suya en primer plano. Cabello suelto, mirada firme y un vestido negro escotado: así se mostró, sin filtros, pero cargada de seguridad. “Con cada año me siento más grande… pero no de edad, de amor propio y disfrute”, agregó.
No necesitó una gran producción ni una celebración masiva. Bastaron algunas palabras sinceras y una selfie frente al espejo, con el texto: “¡Hola 45! Feliz cumple para mí”. En otra historia, fue aún más clara con su estilo: “Como sabrán, no hay festejo. Pues odio ser anfitriona. Ya con los saludos y un almuerzo con mis hijos, soy inmensamente feliz”, escribió sobre fondo negro.
